jueves, 29 de agosto de 2013

Volvieron las lluvias



Esta madrugada la bóveda celeste se abrió y dejó escapar toda el agua de los pantanos celestiales con un enorme estrépito de rayos, truenos y relámpagos que yo afortunadamente no oí porque tengo taponado un oído y estaba durmiendo de lado y menos mal porque le tengo algo más que respeto a las tormentas.
Cuando nos hemos levantado, la inundación en el salón de la casa era evidente pues se quedaron abiertas las ventanas y no nos dimos cuenta así que llevamos todo el día secando cojines. La piscina a punto de rebosar y es que nos cayeron encima nada menos que 80 litros por metro cuadrado entre las seis y las once que es cuando salió el sol y que al jardín le han venido de perillas.
Esperemos que esta noche no se repita el fenómeno y, por si acaso, dejaremos las ventanas bien cerradas.

miércoles, 28 de agosto de 2013

Adiós, Geibal, hasta el verano que viene



         A los dos meses justos, es decir, ayer a las seis de la tarde nos reunimos todas las familias que acogemos niños y niñas saharauis en la provincia de Córdoba. Aunque este año han sido algunos menos, los acogidos han sido más del centenar. Y, por más que todos sabemos que se tienen que ir con sus familias, no cabe duda que el nudo en la garganta era inevitable: las últimas fotos, los últimos besos y abrazos,… Los que peor lo pasaron son los que saben que ya no volverán el próximo año porque han cumplido la edad máxima para participar en la actividad. (¡Ánimo, Ana, ya mismo podrás volver al Sahara para pasar unos días con la familia de Salaqu y Salka!).
         Geibal volverá el próximo verano y acompañada de Fatima Gaia (la hermana de nuestro Brahím) con lo que la alegría será doble.

martes, 20 de agosto de 2013

El “Agua de Litines”



         ¿Quién se acuerda ya de las sodas y gaseosas caseras? Hoy día es casi impensable el fabricarse uno mismo la gaseosa pero no hace demasiado tiempo que, sobre todo en el norte de la provincia de Córdoba, la gaseosa se fabricaba en casa y otro tanto pasaba con la soda donde no había fábricas de “Sifón” (otro elemento habitual en las casas y hoy prácticamente desaparecido).
         Recuerdo que mi madre utilizaba los “Papelillos de gaseosa” para que las magdalenas pujasen más. Utilizaba los de la marca “El Tigre” y, cuando estábamos en el campo esa era la gaseosa que consumíamos porque el pueblo más cercano estaba a más de ocho kilómetros y no había coche como ahora.
         En casa de mis suegros en Villanueva de Córdoba se hacía “Agua de litines” (soda para entendernos) todos los días y, a veces en dos ocasiones en el mismo día. Ése era el refresco usual de la casa hasta no hace mucho.

lunes, 19 de agosto de 2013

Champán Cordobés



         Otra bebida refrescante y muy conocida en la Córdoba de los cincuenta era la combinación de vino blanco fino con gaseosa de limón y que dieron en llamar “Champán Cordobés” y que podría considerarse el ancestro del hoy muy extendido “Rebujito” que se bebe a raudales en las ferias de nuestra Andalucía. Los puristas decían que era un sacrilegio echarle al vino fino de Montilla o Moriles una parte de gaseosa y otros más en plan de pitorreo decían que era estropear la gaseosa.

viernes, 16 de agosto de 2013

Aniversario



Ayer a las doce de la mañana aproximadamente se cumplieron treinta y ocho años del día que Martina y yo nos casamos. Fue un día de calor de esos que se recuerdan durante mucho tiempo y nos pasamos la “noche de bodas” cada uno en una de las terrazas que tenía el piso que alquilamos en Córdoba para vivir.
Lo más sorprendente del caso es que Martina siga soportando los múltiples defectos que me adornan y, sobre todo, mi falta de afición por la cocina. Yo trato de compensarla en lo posible con mis “habilidades” en el campo de la jardinería y produciendo productos  hortícolas pero sé que esto no es comparable al intenso trabajo de llevar una casa que durante bastantes años compatibilizó con su trabajo en la escuela.
Espero que no se canse y dentro de doce años celebremos las “Bodas de Oro”.

jueves, 15 de agosto de 2013

La “Zarzaparrilla”



         Como ya dije en otro momento, yo pertenezco a una generación anterior a la Coca-cola y cuando era pequeño bebía refrescos de naranja o de limón de “Pijuán”, de “La Constancia” o de “El Marrubial” y una cosa muy parecida a la bebida americana que se llamaba “Zarzaparrilla” y que estaba hecha a base del jugo de la raíz de una planta que se cría en estado silvestre en los arroyos enredada con las zarzas. La verdad es que cuando probé la dichosa Coca-cola no me gustó pero como la última marca que fabricaba la Zarzaparrilla había desaparecido del mapa pues tuve que acostumbrarme al nuevo sabor. Y pienso yo que tal vez la compañía americana tendría algo que ver con la desaparición de las otras. (Zarzaparrilla 1001 por ejemplo que era de las más conocidas).

miércoles, 14 de agosto de 2013

La Amapola



Siguiendo con el tema de las bebidas refrescantes y recordando mi época de juventud en el barrio de la Ciudad Jardín de Córdoba, voy a referirme a otra combinación mucho menos conocida pero que en su tiempo se consumió bastante. Me refiero a la “Amapola” que no era otra cosa que un Valgas del tamaño de una copa de vino si bien el vino que dio origen a esta denominación no era el Valdepeñas sino el tinto de Jumilla que daba una diferente coloración a la bebida y que algún parroquiano del Bar Paco (que estaba junto a “Costa sol”) se le ocurrió comparar con un supuesto zumo de amapolas. Su difusión fue mucho más local que la del Valgas pero no he podido resistirme a referirme a ella como elemento que perteneció a una etapa de mi vida en mi ciudad natal.

lunes, 12 de agosto de 2013

El “Valgas”



Es posible que a nadie le interese esta entrada pero es algo que tiene sus orígenes en la época de mi nacimiento y, como tal, es importante para mí como coetáneo mío que lo es.
De todos es bien sabido que el “Cubalibre” es un combinado de Ron y Coca-cola y de la procedencia de la primera de las bebidas y lo que representaba la segunda procede su nombre, (aunque con el tiempo se haya generalizado el nombre a muchas otras combinaciones e incluso se ha bastardeado llamándolo “Cubata”), pues bien, la denominación “Valgas”, (pronunciado “Vargas” en Andaluz), corresponde a una combinación de origen cordobés que procede de las palabras Valdepeñas y Gaseosa que en los años cincuenta (cuando todavía no había Coca-cola en España y, mucho menos “Cubalibres”), era la bebida fundamental del caluroso verano. No obstante, la gaseosa “La Casera” en los años setenta comenzó a popularizar la misma bebida con el nombre mucho menos ingenioso de “Tinto de Verano” pero que ha arraigado más debido a las campañas publicitarias de la marca en cuestión.
De todas formas yo, que soy un poco contracorriente, sigo pidiendo un “Valgas” aunque muchas veces tenga que explicar de qué bebida se trata y aguantar después el consabido: “Ah, ya, un tinto de verano, ¿no?”

domingo, 11 de agosto de 2013

Tan sólo aire y poco más



Sintió cómo sus pensamientos le gritaban por dentro sumiéndola en un mar de confusión que estaba a punto ya de volverla loca de remate, pero no se amilanó y continuó caminando en dirección a lo que podía significar su fin. Jamás había pensado que las cosas tomarían un derrotero que, por inesperado, no era fácil de controlar y menos aún en una situación tan agobiante.
El viento empujaba colaborando a que todo terminase antes y su sufrimiento cesara al fin. Aquella pared se aproximaba a una velocidad cada vez mayor. Todo estaba perdido. Nadie se acordaría al cabo de un rato… Si aquél niño seguía soplando, volvería a nacer otra pompa de jabón.

sábado, 10 de agosto de 2013

Fin de la cita



¡Cómo me hubiera gustado criticar la comparecencia del Presidente Rajoy ante el pleno del Congreso de los Diputados!, pero me fue totalmente imposible porque fue de tal “densidad” el contenido de su parlamento que me sentí impotente (en el mejor sentido de la palabra) para analizar sus palabras cargadas de sinrazón y de lugares comunes con el sonsonete estúpido de “fin de la cita” que seguramente alguno de sus sesudos asesores le hizo para que la usara como remoquete a lo largo de su insustancial e insulsa intervención ( que hay que echarle valor para hablar durante cuarenta minutos y no decir apenas nada como en los mejores tiempos de Felipe González).
En definitiva que no voy a decir nada al respecto y me lo voy a guardar para mí que, cualquiera sabe, a lo mejor me sirve para algo el día de mañana.
Tal vez algún día veamos unos políticos diferentes proponiéndonos soluciones diferentes y sin necesidad de lucrarse a costa de lo que es de todos.
¡Que así sea!

viernes, 2 de agosto de 2013

¿Sirenas?



El ruido de las olas al romper mansamente en la arena de la playa era lo único que se escuchaba en el silencio de la noche. Aquél rumor que otras veces le había servido para dormirse ahora se había vuelto contra él y estaba a punto de sacarle de quicio, tal era su estado de ánimo después de lo ocurrido el día anterior.
Aquél era un verano de los más calurosos que recordaba y la mañana ya advertía con su bochorno de lo que iban a ser las horas centrales del día, cuando hasta las chicharras dejaban de cantar por lo elevado de la temperatura.
Tony cogió su tabla de windsurf y se dirigió resueltamente hacia la orilla. El viento caliente de tierra infló su vela en cuanto se puso de pié sobre la tabla y comenzó a arrastrarle mar adentro como tantas y tantas veces había pasado a lo largo de los años que llevaba practicando su deporte favorito.
Estaba tan ensimismado contemplando la caprichosa gama de azules que presentaba el mar que, cuando quiso darse cuenta, dejó de ver la costa que debía ser su referencia para volver.
En principio no se puso nervioso y cambió la orientación de la vela para marchar a contraviento pero en ese mismo instante el viento dejó de soplar, se instaló una calma chicha y negros nubarrones cubrieron el cielo dando al traste con su posibilidad de orientarse por el sol.
Se sentó en la tabla y dejó caer la vela que quedó flotando en el agua. Poco a poco, y con el suave balanceo, un sueñecillo se fue apoderando de él. No tenía idea de cuanto tiempo habría transcurrido cuando un chapoteo le sacó de su sopor. Miró hacia el lugar de donde procedía el ruido y solo acertó a ver el extremo de un par de colas de pez que se hundían bajo el agua y volvió a sumirse en el sueño quedando exánime tumbado sobre la tabla. Le pareció escuchar entre sueños voces de mujeres pero no consiguió abrir los ojos.
La tarde agonizaba cuando Tony recobró el sentido y se encontró tumbado en la arena de la playa. Su tabla se encontraba a pocos metros de él y fuera del alcance de las olas que le lamían suavemente los pies. Instintivamente dirigió su mirada hacia el mar y creyó vislumbrar un par de cabezas que se hundían en el agua. Esperó para ver si volvían a salir a la superficie pero fue inútil, nadie asomó entre las tranquilas aguas.
¿Quién le había sacado del agua? ¿Tal vez un delfín amigo de los bañistas despistados? ¿O quizás…? No, no podía ser,… las colas que vio cuando estaba en medio del mar tenían escamas,… y los delfines no las tienen y no tienen voces de mujer…

jueves, 1 de agosto de 2013

El adivino



¡Hola! ¿Es el adivino?
No, se ha equivocado de número
¿Está seguro de que no es el adivino?
Le digo que no, que no soy el adivino
Pues estoy llamando al número de teléfono que sale en la tele
Pues le repito que yo no soy el adivino
¿Y no podría hacer un esfuerzo y adivinarme algo?
Que no, que yo no soy adivino ni nada por el estilo
Pero por una vez podría probar…
Le digo que no, que no puede ser, que esto no es serio
Pero si Vd. no pierde nada por probar, ande sea bueno y adivíneme alguna cosa
La verdad es que es Vd. pesada,… pero en fin, probaré. Dígame ¿qué quiere que le adivine?
¿Es una prueba o va de verdad?
Hagamos una prueba…
Bien pues dígame ¿cómo conseguiría yo un trabajo en el que se haga poco y se gane mucho?
Pues sabe lo que le digo…
No si Vd. no me lo dice
Pues que no le voy a contestar a su pregunta.
¿Y por qué?
Porque me la voy a guardar para mí mismo que yo también estoy en el paro.