miércoles, 3 de diciembre de 2014

Cita



Tu voz sonaba al otro lado del teléfono:
“Regálame una noche de amor apasionada
que esta noche quiero ser sólo tuya
para vivir de nuevo aquel encuentro
en el que nos lo perdonamos todo
cuando por vez primera
sin prisas nos amamos
y ardieron nuestros cuerpos
fundiendo nuestras almas”.
Te contesté:
“Ven pronto, no pierdas ni un instante,
impaciente te espero apasionado”.
Veinte veces bajé al piso de abajo
pretendiendo escuchar tus pasos fuera.
Ahora sí, ahora he sentido tu llamada
y volviendo mis pies sobre mis huellas...
trepidante bajé de dos en dos las escaleras,
trémula y torpemente abrí la puerta
y tú estabas allí radiante y bella.

No hay comentarios:

Publicar un comentario