Tuvimos
una noche desatada
de sexo y
de pasión desenfrenada
mas nunca
recordamos nuestros nombres
tal vez
porque jamás nos los dijimos
nos
fuimos al final sin despedirnos
pues
nunca nos pensamos reencontrar
aquello
no fue amor, tan sólo sexo,
aquella
despedida... sin un beso.