Llevo andurreando por el llamado “Circuito del Colesterol” (Avda. de Aulio, Puente de hierro, Ermita de Belén y vuelta) bastante tiempo junto con amigos y amigas y cada vez estoy más convencido de una observación que alguien me hizo cuando le animé a acompañarme en mis andanzas de tarde-noche y es que si los que andamos por dicho circuito lo que pretendemos es perder peso, estamos totalmente equivocados con la terapia porque en esas caminatas lo único que encontramos son gordos y gordas incluido el que aquí suscribe y me argumentaba que lo correcto para perder peso era precisamente no andar por ese camino que debe estar “contaminado”.
¿Será cierta la observación? Tal vez me plantee cambiar el recorrido por si las moscas.
¿Y si lo que hay que hacer es comer menos? ¿Y si bebiésemos menos cervecita? También habría que probarlo.
No hagáis hoy lo que podáis hacer mañana.
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